“NO HAY PLAGIO, LA MAESTRA LETICIA JONGUITUD AGUILAR, COBRÓ 24 MIL 655 PESOS Y 17 CENTAVOS, COMO INSTRUCTORA DEL TALLER DE METODOLOGÍA”: ANA ISABEL MÉNDEZ ORTÍZ

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El texto Cinco miradas desde la investigación para el trabajo colaborativo, cuyos autores son por parte de la Escuela de Ciencias de la Comunicación (ECC), los maestros: Francisco Jesús Ortiz Alvarado, María Eugenia de la Mora Martínez, Alfredo Barrales Martínez, Mariano Esparza Barajas y Ana Isabel Méndez Ortiz; los alumnos: Stephanie Ortiz del Castillo, Luz Aurora Valdez Yáñez, María Lucero Negrete Espino, María Fernanda Padilla Gil, Jorge Rubio Barrón, Iván Cárdenas Martínez, Rafael Macías Hernández, Judith Macías Montes y María José Puente Zavala (los tres últimos recién egresados), y la maestra María de Jesús de la Mora Martínez, de la Facultad del Hábitat de la UASLP, coordinado por el maestro Francisco Ortiz, profesor investigador de tiempo completo adscrito a la ECC, ha sido objeto de demanda de autoría por parte de la maestra Leticia Jonguitud Aguilar. Ante esta situación, es necesario informar lo siguiente:

1. En octubre del año 2012, la Escuela de Ciencias de la Comunicación requirió a la maestra Jonguitud Aguilar, mediante contrato de prestación de servicios, como instructora del Taller de metodología y técnicas para investigación y publicación, con duración de 90 horas presenciales y no presenciales, dicha actividad tuvo como resultado una serie de artículos publicables, actividad por la que se le pagó $24,655.17; el diseño curricular del curso corrió a cargo de ella y del maestro Ortiz Alvarado. Así lo determina el contrato firmado por el licenciado Juan Manuel Reynoso, abogado de la UASLP, y la propia instructora, al igual que la factura que la maestra generó para cobrar por su trabajo. Los autores cumplieron con su asistencia al mencionado taller con la entrega de sus avances de investigación hasta que éste concluyó, así se dio por terminada la labor de la maestra Jonguitud Aguilar.

2. En el año 2013, se encomendó al maestro Ortiz Alvarado que compilara el texto del que se hace mención, como parte de las actividades que realiza en su puesto de profesor investigador de la ECC. El catedrático integró el trabajo; convocó a un grupo de maestros como miembros de la comisión para revisar cada uno de los documentos que formarían los capítulos del libro, y que coinciden con el producto del taller impartido por la maestra Jonguitud, quien también fue miembro de esta comisión de arbitraje y cuyo crédito aparece puntualmente en el libro. Se informó a los autores sobre las correcciones realizadas a las investigaciones, y estuvieron de acuerdo. El maestro Ortiz trabajó el diseño de imagen con el fotógrafo, entonces estudiante de la escuela; con el diseñador que maquetó el texto, y se auxilió de otros estudiantes prestadores de servicio social y de prácticas de campo; la corrección de estilo la hicieron algunos de los profesores autores de los capítulos. Ninguno de los mencionados ni los autores recibió pago alguno por su trabajo.

3. En 2014, se reunió la cantidad requerida para imprimirlo bajo el sello editorial de la UASLP, dado que es trabajo de comunidad de la ECC. En ningún momento la dirección de la escuela estableció un compromiso de coordinación para la compilación del contenido del libro con una persona ajena a la ECC; se prevé que una responsabilidad así sólo puede ser conferida a los miembros de ésta, ya que la comunidad está obligada a trabajar de acuerdo con el Estatuto Orgánico que rige las acciones sustantivas de nuestra casa de estudios y la forma de contratación de los profesores de tiempo completo.

4. Por lo anterior, para la Escuela de Ciencias de la Comunicación nunca hubo ningún compromiso de trabajo con la maestra Leticia Jonguitud Aguilar para coordinar la publicación del libro. En caso de que —como ella argumenta— el maestro Francisco Ortiz hubiera acordado con ella asumir entre los dos dicha coordinación, fue a título personal, y nunca se informó a la Dirección de la ECC. Para nuestra institución es importante dejar en claro que el trabajo no se le roba a nadie; cada uno de los participantes del texto tiene el crédito correspondiente por su labor, y se reitera, sin cobro alguno.

Para la Escuela de Ciencias de la Comunicación, es un orgullo poder mostrar a la comunidad una obra que integra el trabajo de investigación de maestros y estudiantes. En él se refleja que estos últimos pueden vivir experiencias de aprendizaje que trascienden la cátedra cotidiana, y realizar productos que forman parte de su currículum; además de que el docente se enriquece en estas dinámicas de colaboración.

ATENTAMENTE

Mtra. Ana Isabel Méndez Ortiz. Directora de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la UASLP.