¿GOBIERNO POLICIAL?
*.- CON UNA AMPLIA RED DE COMPLICIDADES, ENRIQUE GALINDO, USA LOS RECURSOS DE LA GENDARMERIA PARA PROMOVER SU IMAGEN, EN SAN LUIS POTOSÍ.
*.- JUAN JOSE RODRIGUEZ MEDINA, SU GESTOR DE SIMPATIAS PARA LA GUBERNATURA. OSORIO CHONG LO IMPULSA.
Ridiculum acri Fortius & melius magnas plerunque secat res (“Un chiste, más fuerte y mejor que la acritud en el discurso, resuelve a veces los asuntos importantes”: Paulus Jovius).
Si efectivamente se confirma que Enrique Galindo Ceballos es el próximo candidato a Gobernador por el PRI al estado de San Luis Potosí, no sólo se estará premiando el terrible desempeño de un funcionario gris y que además representa al área que menos resultados ha aportado a los primeros años del Gobierno de Enrique Peña Nieto: la seguridad pública y también sería el comienzo de la instauración de los llamados “gobiernos policiales”.
Y es que fuera de apasionamientos, filias y fobias, los mexicanos no se sienten seguros en su propio país, muy a pesar de la pretensión oficial de presentar a la pomposa “Gendarmería Nacional” de la cual es alto Comisionado el potosino en cuestión como un área profesional y que procura la seguridad de todos los habitantes.
La Policía Federal, es simplemente el brazo ejecutor del Presidente de la República y sólo a sus intereses responde.
En días pasados el presidente del PRI, Cesar Camacho Quiroz convocó a una reunión en la sede nacional a los aspirantes a obtener la candidatura por San Luis. Entre ilusos y farsantes se coló el Comisionado Federal, sin haber manifestado con anterioridad su aspiración y militancia priista, al parecer bastó una aparición reciente en un evento público en el auditorio Miguel Barragán para que se le considerase parte del proceso de selección.
No hay que olvidar que apenas si se ha presentado recientemente la convocatoria y los registros serán hasta la semana entrante. La condición de supuestos candidatos fue suficiente para ser convocado el primer gendarme del país a una reunión de carácter político.
Enrique Galindo es un tipo con suerte, o tal vez, podría decirse con mayor precisión que se procura la suerte. Son bien conocidas sus dotes de animador, anfitrión alborozado, educado protervo. Con abellacado estilo suele conducirse en cualquier escenario o circunstancia, el uso de sus facultades camanduleras le ha permitido sobrevivir en la administración pública desde su etapa estudiantil. Siempre obtiene lo que busca y en cierta forma, es admirable el empeño que utiliza a la hora de agradar a una persona sin importar su ruindad.
Así se ganó hace años la protección de Miguel Naya Guerrero, otrora poderoso y sempiterno jefe policiaco de San Luis Potosí. Bajo su protección, aprendió la omertá mexicana, el valor de la hermandad en el medio policiaco y de cómo el uso discrecional del poder en favor de los poderosos se transforma en el futuro, en oportunidades de empleo.
Del comandante Naya aprendió que a base de favores se puede tejer una inmensa red de complicidades. Los ricos y poderosos adoran a un policía dispuesto a todo, incluso matar si es necesario.
Quienes conocieron al ahora Comisionado de policía en su etapa inicial dentro de la burocracia le llamaban “pollito de leche”, sin ahondar mucho en el origen y significado del mote, se advierte que en sus inicios, el galancete supuraba ingenuidad, pero de igual forma, ya era un obsesivo adulador de cualquiera que pudiese proporcionarle un ascenso en la vida. Un atajo a la gloria.
Ser un quitapelillos, lisonjero que transpira indulgencias es algo que no puede pasar desapercibido. Sorpresivamente Enrique Galindo fue nombrado por el alcalde Octavio Pedroza Gaitán -con quien lo une una particular amistad- como Director General de Policía y Tránsito del municipio de la capital, cargo que desempeñó hasta el fin de esa administración.
Tras un breve y forzado exilio en España, el Comisionado de policía se integró en el 2009 al equipo de campaña de Alejandro Zapata Perogordo, quien resultó derrotado por Fernando Toranzo Fernández. Sin opciones y desesperado, Enrique Galindo cobró viejos favores y después de un breve suspiro, Victoria Labastida -recién electa alcaldesa de la capital- lo nombró nuevamente en el cargo de jefe de la policía capitalina, cargo al que no fue necesario presentarse pues en los días previos a la toma de protesta, el Gobernador Fernando Toranzo Fernández lo llamó para ofrecerle la Secretaria de Seguridad Pública del Gobierno estatal, ya que su propuesta inicial fue echada por tierra por una sospechosa filtración y ante la eventualidad, Miguel Naya promovió oportunamente a su pupilo.
La salida de Enrique Galindo Ceballos del Gobierno Fernando Toranzo es algo que nunca ha quedado muy claro. Más allá de los exabruptos del mandatario y las pifias del Secretario de Seguridad, la versión oficial no dejo satisfecho a nadie.
Toranzo afirma que la misma entidad que contrataría a Enrique Galindo posterior a su separación del cargo, le sugirió despedirlo al no haber aprobado los exámenes de control y confianza que exigía la normatividad vigente; incluso, ese mismo argumento manifestó el jefe del ejecutivo en una reunión de la conferencia nacional de gobernadores. La contradicción manifiesta.
Cuando Enrique Galindo fue nombrado parte del gabinete de Enrique Peña Nieto, despertó la sospecha de algunos y la envidia de otros, pero casi nadie imaginó que podría ser un serio adversario en busca de la nominación para buscar la gubernatura en el 2015. Nadie lo vio venir.
Solo Juan José Rodríguez Medina, alias “el Tigre” observó condiciones para comenzar a promover la posible candidatura del Comisionado de policía e inmediatamente buscó la oportunidad para ofrecer sus servicios como gestor de simpatías. A cambio, la oportunidad para su incompetente vástago en las filas de la Policía Federal donde fue nombrado, Juan José Rodríguez Regil como titular del área jurídica de la academia sin contar con la cedula profesional como lo ordena la normativa.
Asimismo, Enrique Galindo favoreció a la empresa La Orquesta con un contrato para elaborar un video promocional de la Policía Federal, compañía de la cual en su momento el funcionario Rodríguez Regil poseía el 20 % de las acciones. Hijo de tigre, pintito.
El “maestro” Galindo -como gusta ser llamado- posee la habilidad necesaria para llegar a ser Gobernador del estado. Ha construido al paso del tiempo una red intrincada de complicidades y compromisos. No pasa inadvertido que a pesar de los excesos recientes del personal a su mando, sea precisamente Miguel Ángel Osorio Chong quien puja por la posibilidad del gendarme.
El columnista del diario nacional La Jornada y director de la Jornada San Luis, Julio Hernández López habló sobre la posibilidad del inicio para instaurar un “gobierno policial”, que sería una de las tácticas peñistas y por supuesto del Secretario de Gobernación, Osorio Chong.
En la columna Astillero de éste día, autoría del citado periodista, refiere que: “César Camacho reunió en el comité nacional priista a 11 presuntos aspirantes a la gubernatura de San Luis Potosí, en busca de concertar una candidatura “de unidad”, al estilo mostrado en el caso Nuevo León. Destaca la presencia del comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, quien ha dedicado tiempo y recursos (en SLP están desplegadas brigadas de gendarmería “atendiendo” amablemente a la población) en pro de un proyecto que significaría el primer paso para crear gobiernos policiales…”.
Y es que Enrique Galindo Ceballos es un profesional en su ramo. Es un calandrajo, abyecto y pervertido de la política y eso precisamente es lo que quiere Osorio Chong.
Sea pues Enrique Galindo Ceballos, malasombra de días aciagos, lisonjero de altos vuelos, carajote inmaculado.