• La oportuna intervención de la patrulla número 9 de la Policía Urbana Bancaria e Industrial, con el agente David Mendoza Silva al frente, llegó al lugar de los hechos. Entre policías y trabajadores detuvieron a David Orta Rivera, de 20 años de edad, uno de los implicados directos en el asalto a la pagaduría del INTERAPAS.

• Junto con otro policía bancario que cuidaba la puerta, los empleados iniciaron la persecución de los asaltantes. “Los apedrearon con rocas”, dijo un testigo. A falta de armas los trabajadores los lapidaron para rescatar su dinero. Los ladrones descendieron del automóvil para fugarse esquivando una lluvia de rocas.

• De súbito la aristocrática Zona Universitaria y la elegante Avenida Carranza, se convirtió en un campo de batalla desigual: los delincuentes disparando sus armas de fuego y los trabajadores arrojándoles piedras, algunas de tamaño descomunal.

SAN LUIS POTOSÍ. VIERNES, 13 DE AGOSTO DEL AÑO 2010.- A balazos, tres hampones robaron la nómina del Organismo Operador de Agua Potable de la Ciudad de San Luis Potosí, mejor conocido por sus siglas como el INTERAPAS.

Un policía bancario y el pagador, fueron heridos.

Al hacerles frente el vigilante recibió un balazo en el estómago y otro en el hombro derecho.

El cajero tiene un tiro de pistola escuadra calibre 380 en la pierna, cerca de la arteria femoral. Ambos se reportan graves, casi al borde de la tumba.

Un trabajador fue lesionado de una tremenda pedrada en la cabeza.

Los rufianes asaltaron la pagaduría situada en el área denominada “La Planta de Los Filtros”, ubicada en la Colonia de Morales, frente a las instalaciones del elegante y exclusivo “Club Deportivo Potosino”.

¡DINERO MALDITO!

Testigos dijeron que a las 8 de la mañana con 30 minutos, los tres rufianes irrumpieron en las instalaciones del Organismo Operador del Agua.

Al huir con un maletín repleto de dinero, los asaltantes subieron a un automóvil de color negro, modelo Spirit, con placas VBA 30-50 de Estado de San Luis Potosí.

La desgracia nunca llega sola: el auto no arrancó.

 

En ese instante, un grupo de por lo menos 30 trabajadores que esperaban su paga quincenal, se dieron cuenta de que los bandidos escapaban con el maletín de color negro, donde estaba su dinero.

Junto con otro policía bancario que cuidaba la puerta, los empleados iniciaron la persecución de los asaltantes.

“Los apedrearon con rocas”, dijo un testigo.

A falta de armas los trabajadores los lapidaron para rescatar su dinero.

Los ladrones descendieron del automóvil para fugarse esquivando una lluvia de rocas.

De súbito la aristocrática Zona Universitaria y la elegante Avenida Carranza, se convirtió en un campo de batalla desigual: los delincuentes disparando sus armas de fuego y los trabajadores arrojándoles piedras, algunas de tamaño descomunal.

Los pillos siguieron corriendo y como en las películas de Hollywood, más adelante, los tres sujetos encañonaron a una familia que transitaba por la Avenida Carranza, y le robaron un automóvil Sentra de color blanco con placas VBZ 89-86.

El destino jamás necesita permiso: los bandidos estrellaron el automóvil en el monumento a la Bandera de la Avenida Carranza, que está frente a la puerta del exclusivo “Club Deportivo Potosino”.

La oportuna intervención de la patrulla número 9 de la Policía Urbana Bancaria e Industrial, con el agente David Mendoza Silva al frente, llegó al lugar de los hechos. Entre policías y trabajadores detuvieron a David Orta Rivera, de 20 años de edad, uno de los implicados directos en el asalto a la pagaduría del INTERAPAS.

En el asiento del copiloto del vehículo conducido por los delincuentes, se encontró un arma corta tipo escuadra de color negro, al parecer por su tamaño, calibre 380, la cual quedó a resguardo de las autoridades. En el suelo, junto al auto de los asaltantes, se localizó un aparato de comunicación móvil.

También fue hallada en medio de un árbol, un revolver y una camiseta de color blanca, que los rufianes abandonaron. Los pillos la abandonaron entre las calles de Río Naza y Río Lerma en la Colonia Los Filtros.