●.- Este grupo de mujeres violentas infiltradas en la manifestación de protesta, han sido identificadas como “LAS PANDILOCAS”, es decir “LAS PANDILLERAS LOCAS”. Con esta violencia extrema, destructiva, “jamás se ganarán el respeto de la humanidad, mucho menos de la sociedad potosina”.
●.- Lo que cometieron fue una cadena de delitos, que deben de ser castigados con todo el peso de la ley, al dañar patrimonio cultural del estado.
SAN LUIS POTOSÍ, MÉXICO. MARTES 26 DE NOVIEMBRE DEL 2019 (agenciadigitaldenoticias) ●.- Un grupo de mujeres violentas, que se infiltraron en una marcha de protesta en demanda de mayor seguridad pública, y fin a los feminicidios, prendieron fuego a la puerta del edificio central de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
El Edifico Central es un recinto público que da difusión a la cultura y que es símbolo para la UASLP desde 1623; un lugar que da identidad a los universitarios, “hay momentos que nutren de la historia que caracteriza a la institución y la universidad está plagada de innumerables anécdotas, luchas y trabajo de muchas generaciones”.
Este grupo de mujeres violentas infiltradas en la manifestación de protesta, han sido identificadas como las “LAS PANDILOCAS”, es decir “LAS PANDILLERAS LOCAS”. Con esta violencia extrema, destructiva, “jamás se ganarán el respeto de la humanidad, mucho menos de la sociedad potosina”.
Lo que cometieron fue una cadena de delitos, que deben de ser castigados con todo el peso de la ley, al dañar patrimonio cultural del estado.
El movimiento inició sin complicaciones al filo de las 18:30 horas con un recorrido por el Centro Histórico, partiendo de la Plaza de Armas, hacia el Instituto de las Mujeres y la Fiscalía General del Estado, sin embargo, al atravesar la Plaza de los Fundadores, la manifestación subió de rencor, por los recientes sucesos dentro de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, en el que hace unos meses, intentaron secuestrar a una joven de la facultad de psicología a plena luz del día. Los insultos de las “PANDILOCAS”, fueron hacia el rector Manuel Villar.
Esperanza Lucciotto madre de Karla Pontigo Lucciotto fue la única de las mujeres en alzar la voz ante los medios de comunicación y pidió a las autoridades que trabajen para esclarecer todos los feminicidios y se les vea precisamente como lo que son.
Las mujeres también exigieron al presidente municipal de la capital, Xavier Nava Palacios, las medidas necesarias para brindar seguridad a mujeres y niñas y al gobernador Juan Manuel Carreras, el esclarecimiento de los feminicidios ocurridos en el estado y de igual manera, al presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Juan Paulo Almazán Cué, el castigo de los culpables.
«Estamos juntas, estamos enojadas, estamos organizadas, estamos luchando de frente: en las calles, en las universidades, en los medios, en nuestras propias casas, en los espacios que nos son prestados y en los que hemos tomado para exigir justicia».
La manifestación terminó en la Plaza de los Fundadores, con la quema de la puerta del Edificio Central de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, demandando la salida de acosadores y mejor seguridad en los campus.
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