¡ASESINATO EN EL PENAL!
CIUDAD DE SAN LUIS POTOSÍ.- Un interno del Centro de Prevención y Readaptación Social de “La Pila” murió luego de recibir tremenda golpiza, primero fue detenido con lujo de violencia, por presuntos agentes de la Policía Ministerial del Estado, quienes lo pusieron a disposición de un juzgado penal en el CEPRERESO, lugar en donde poco después de haber ingresado fue tundido a golpes, trasladado al Hospital Central en donde finalmente murió.
Filiberto Hernández Hernández de 40 años de edad fue detenido el jueves diez del presente mes por agentes de la Policía Ministerial del Estado en su vivienda que se ubica en la comunidad Ojo Pinto, perteneciente al municipio de Mexquitic de Carmona, había una orden de aprehensión en su contra por el delito de violación.
Los policías, según testigos, ingresaron con lujo de violencia al inmueble, no contaban con orden de cateo, se metieron hasta la habitación en donde dormía el ahora occiso, eran aproximadamente las 23:00 horas, en el interior del inmueble lo tundieron a golpes, le robaron el efectivo que traía consigo, un DVD, dos pistolas, una escopeta e intentaron llevarse una camioneta Chevrolet de color blanco pero no pudieron.
Testigos indican que los policías lo tundieron a golpes en el interior de la casa porque hasta afuera se escuchaban los gritos de Filiberto, que les pedía que ya no lo golpearan, que si lo querían detener no había problema, pero que no era necesario que lo golpearan.
El afectado fue puesto a disposición del Juez Penal que le giró la orden de aprehensión e ingresado al Centro de Prevención y Readaptación Social.
Familiares del afectado indican que supieron de él hasta que se encontraba en el CEPRERESO, esto ocurrió el sábado 12 del presente mes, pero aunque intentaron verlo no pudieron porque no era “día de visita”, pero él les dijo que se encontraba bien, pero pidió que se comunicaran con su papá que se encontraba en Estados Unidos para que viniera al rancho a hacerse cargo de la venta de los animales “porque no sé cuánto tiempo vaya a estar aquí encerrado”.
Fue lo último que supieron de él, porque el mismo sábado en la noche ingresó al Hospital Central porque presentaba múltiples lesiones por golpes de “terceros”, y pese a los esfuerzos de los médicos finalmente murió.
Las autoridades no se tomaron la molestia de informar a sus familiares que Filiberto había muerto hasta el miércoles pasado, cuando les avisaron que si no iban a identificar el cadáver lo iban a mandar a la fosa común.
Cornelio Hernández, padre de Filiberto arribó a ésta ciudad el jueves pasado, procedente del estado de Florida, E.U., y se enteró que el cuerpo de su vástago se encontraba en el depósito de cadáveres del Hospital Central, iniciando los trámites para la devolución del cuerpo.
Sin embargo cuando se enteró de la serie de irregularidades que hubo en la detención y reclusión de su hijo y sobre todo de la forma en que murió, solicitó la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que se proceda a indagar lo ocurrido y si existe alguna responsabilidad por parte de los Policías Ministeriales que lo detuvieron se proceda penalmente en su contra.
En cuanto a la acusación que pesaba en contra de Filiberto Hernández por el delito de violación, indicaron que la joven que lo acusó iba acompañada de su madre en forma frecuente a visitar a Filiberto y que él nunca reconoció haber atacado a la jovencita, pero que aún así hizo cargo de los gastos médicos, incluso la mamá iba con él a pedirle para la despensa.
¡EJECUTAN A JUEZ!
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Los muertos son: Alfredo Campos Salazar, quien era Juez menor de Xilitla y el Secretario de Acuerdos del juzgado, Andrés Juárez Morán, hermano del subprocurador de Justicia de la zona media, Aldo Odiseo Juárez Morán.
XILITLA.- El Juez y el Secretario de Acuerdos del Juzgado Menor murieron tras ser atacados por sujetos armados cuando transitaban por la carretera federal número 120, tras la agresión, la unidad en la que viajaban chocó contra una camioneta; el juez ya había sido víctima de un atentado en enero del 2010.
La tarde del viernes, la Procuraduría de Justicia en el Estado a través de las redes sociales informó que las muertes del juez y del secretario se había registrado en un accidente automovilístico, más tarde en un boletín, se dijo que la Policía Ministerial del Estado ya investigaba la causa de la muerte.
El ataque ocurrió en el kilómetro 8 de la carretera federal 120, cerca de la Y Griega que va de Xilitla al municipio de Jalpan, Querétaro, poco antes de las cinco y media del viernes.
Los muertos son: Alfredo Campos Salazar, quien era Juez menor de Xilitla y el Secretario de Acuerdos del juzgado, Andrés Juárez Morán, hermano del subprocurador de Justicia de la zona media, Aldo Odiseo Juárez Morán.
Viajaban en un sedán, color blanco cuando fueron atacados por sujetos que viajaban en una camioneta Ford Lobo, quienes sacaron sus armas y les dispararon.
El conductor perdió el control y chocó contra una camioneta Nissan; en el sitio las autoridades encontraron casquillos de 9 mm y un cargador de un fusil AR-15 con cartuchos útiles .223.
Uno de los cuerpos quedó en el asiento del copiloto y el otro en el suelo, entre las unidades chocadas; los cadáveres de los trabajadores del Poder Judicial fueron trasladados a Servicios Periciales, donde se determinó que los dos hombres presentaban varios impactos de bala.
“Derivado de estos hechos la Policía Ministerial del Estado, logró la detención de una persona quien se en encuentra bajo investigación”.
La Procuraduría de Justicia de la zona Huasteca Norte continúa con las investigaciones de la doble ejecución.
EN ENERO DE 2010 SALIÓ ILESO DE OTRO ATENTADO.
El 8 de enero de 2010, poco antes de las 8:00 horas, Alfredo Campos Salazar fue víctima de un atentado cuando viajaba en su automóvil, en el kilómetro 38 a la altura del ejido Villa Guerrero, en la carretera federal 70, cuando era juez menor del municipio de Tamuín.
Viajaba en un Nissan Altima, color negro, modelo 1999, con placas de circulación VBL7165 de esta entidad federativa, cuando fue alcanzado por una camioneta tipo Explorer, color verde, sin placas.
En la camioneta viajaban dos sujetos que después de emparejarse con el auto, comenzaron a dispararle en varias ocasiones contra el vehículo de juez, quien se dirigía de Ébano hacia Tamuín.
En aquella ocasión, el juez tuvo suerte pues resultó ileso, mientras que las balas se impactaron en el marco de la puerta del conductor y una al parecer 9 mm, quedó incrustada en la puerta.
Al parecer éste era el segundo atentado del que el juez menor era víctima y el tercero fue el que le quitó la vida en el municipio de Xilitla.
¡EL MUERTO Nº 10!
MOCTEZUMA.- Un hombre de entre 30 a 35 años salió a flote en las aguas del río Moctezuma la mañana de ayer, fue encontrado por un grupo de pescadores que se encontraban que lo detectaron ante los olores putrefactos que despedía por el estado de descomposición en que se encontraba el cadáver, por lo que dieron parte a las autoridades policiacas; el cuerpo presentaba impactos de bala en la mandíbula y en el pecho.
El reporte fue recibido desde temprana hora, los pescadores mencionaron que encontraron el cadáver flotando en las aguas del Moctezuma, a la altura del rancho Tantojón a un costado del ejido Rincón Brujo.
El sujeto del sexo masculino vestía playera azul, pantalón, verde, un zapato negro y portaba un collar color rojo con negro y aunque se desconoce su identidad se suma a los muertos del grupo delictivo que atacó al Ejército Mexicano en días pasados en el municipio de San Vicente.
Es decir que será el decimo cadáver encontrado pues se presume que podrían ser más los que pudieran aparecer en el transcurso de la semana.
Al lugar llegaron elementos de la Sedena, policías estatales, ministeriales para verificar el hallazgo.
El cadáver fue rescatado de las aguas a las 10:40 horas de ayer, para dar fe del cadáver acudió el médico legista Saúl Honorio Barrios y la agente del ministerio publico Zulema Ilián Sánchez Piña, el traslado del cuerpo se hizo a Ciudad Valles por una funeraria de esta misma localidad.
REVIENTAN “RAVE” DE ESTUDIANTES EN VALLE ESCONDIDO. EN EL LUGAR SE ESTABAN SUMINISTRANDO BEBIDAS EMBRIAGANTES A ADOLESCENTES.
CIUDAD DE SAN LUIS POTOSÍ.- Una fiesta tipo “rave”, organizada por estudiantes del CETIS número 125, fue “reventada”, por elementos de la Policía Estatal, quienes aseguraron a un total de 12 personas, entre las que se encuentran cuatro menores de edad, los responsabilizan de los delitos de perversión de menores, debido a que estaban suministrando bebidas embriagantes a adolescentes.
Aproximadamente a las 18:20 horas elementos de la Policía Estatal fueron requeridos en auxilio en una vivienda que se ubica en la calle Valle del Lago en su intersección con la calle Valle de Plata, en el fraccionamiento Valle Escondido, en donde se reportaba con un considerable número de personas estaba ingiriendo bebidas embriagantes en el inmueble abandonado y que escandalizaban.
Los policías arribaron al lugar y se percataron que se trataba de aproximadamente 40 personas entre hombres y mujeres, en su mayoría con uniformes escolares del CETIS número 125, quienes al percatarse de la presencia de las patrullas empezaron a correr en diferentes direcciones.
Los oficiales se entrevistaron con Pedro Flores Reyna de 24 años de edad, quien dijo ser propietario de inmueble e indicó que una menor de nombre Alejandra, quien era su amiga le había pedido la casa prestada para realizar una fiesta tipo “rave”, pero que él desconocía que iba a haber menores de edad.
Los policías le informaron a Pedro Flores que incurría en un delito por darles de ingerir bebidas embriagantes a los adolescentes, por lo que decidió salir del inmueble y enfrentar los cargos.
Los policías detuvieron a Pedro Flores Reyna, Víctor Fabián Ibarra Gómez, Javier López Canela, Abraham Yerba Martínez y José Ricardo Rodríguez Palomo de 18 años de edad, Saúl Alejandro Rodríguez Martínez de 19 años, Luis Antonio Bravo Marentes de 20 y Joel Evenezer Alvarado Guel de 21 años.
También se detuvo al menor Josué de 17 años, y a sus amigos Abraham, Sergio y Jorge de 16 años de edad, quienes quedaron a disposición del departamento de trabajo social para esclarecer su situación, mientras que los otros ocho detenidos quedaron a disposición de la representación social por el delito de corrupción de menores.
¡MILITARES ATRAPAN A VENDEDORES DE DROGA!
CIUDAD DE SAN LUIS POTOSÍ.- Asestaron militares otro golpe a los vendedores de droga. Fueron asegurados dos tipos a quienes les decomisaron más de un millar de dosis de cocaína, equipo de comunicación, cargadores y dos vehículos.
Tras haber sido puestos a su disposición, el Agente del Ministerio Público de la Federación consignó ante el Juzgado Cuarto de Distrito en el Estado e ingresó al Centro de Readaptación Social "La Pila" a los sospechosos.
Los presuntos vendedores de droga fueron identificados como Efrén Mondragón López y Juan Carlos Aguayo Aguilar, por su presunta responsabilidad en la comisión de delitos contra la salud. Ellos fueron capturados, como se anota líneas arriba, por parte de elementos del 34 Batallón del Ejército.
Fue en respuesta por parte del Ejército a una denuncia ciudadana en la que se señalaba que había dos sujetos vendiendo droga en un vehículo Malibú, gris y una motoneta amarilla, en el fraccionamiento Minas del Real.
Efectivos del Ejército se trasladaron a dicho fraccionamiento donde localizaron los vehículos frente a una casa de la calle España.
Cuando llegaron los militares vieron a las personas en el automóvil reportado, y una de ellas al percatarse de la llegada de los soldados bajó del auto y trató de entrar al domicilio citado por lo que se le dio alcance y se le practicó una revisión de rutina a ambos sujetos, inmueble y vehículo.
Se logró el aseguramiento de 1 mil 150 dosis de cocaína, con un peso total de 354 gramos 790 miligramos, dos celulares, dos cargadores AR-15, un automóvil Chevrolet Malibú, gris, modelo 2009 y una motoneta Italika, amarilla.
En la averiguación previa AP/PGR/SLP/SLP-VIII/178/CS/2011 el Fiscal de la Federación aportó elementos de prueba ante el Juez para comprobar la presunta responsabilidad de Mondragón López y Aguayo Aguilar en la comisión del delito referido.
