Hoy por la mañana, 20 de agosto del año 2013, supe que fue
despedida como Directora del Área de Comunicación Social, de la Procuraduría
General de Justicia en el Estado de San Luis Potosí, México, la Maestra en
Ciencias de la Comunicación, Gabriela Antonieta González Chong.
Fuimos compañeros reporteros en el Periódico EL HERALDO, en
la década de 1980.
Fundamos el Periódico SAN LUIS HOY en el año de 1998,
invitados por el Licenciado Alejandro Leal Tobías.
Domina la Teoría y la Práctica del Periodismo, en sus buenas,
y en sus malas artes. En las aulas enseñando como académica, y en la calle como
reportera audaz, en la especialidad del reportaje de Investigación. Muy pocos
están tan calificado profesionalmente, en San Luis Potosí, como Gabriela Antonieta,
para ser Jefes de Prensa de cualquier institución o gobierno.
Pero además, fue Jefa de Grupo de la Policía Ministerial,
que investigaba Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar. Es decir, o sea, es
también un POLICÍA DE CARRERA. Estudiosa y preparada.
La despiden fabricando de ella "un chivo
expiatorio". Es el sacrificio injusto de una gran profesional de la
comunicación humana, haciendo suyo el viejo y conocido refrán, de que siempre
"el hilo se rompe por lo más delgado".
Hago mío el dicho popular: "Honor a quien Honor
Merece".
Dejamos de vernos, y de hablarnos durante muchísimos años.
Ya como Jefa de Prensa de la Procuraduría, si acaso, un
saludo lejano y un grito en la calle de "Adiós, Hermano". Cada quien
a su jornada diaria. Ella a fabricar mensajes institucionales, y yo, a caminar en
busca de denuncias contra el mal gobierno.
Nos une, por lo tanto, el trabajo profesional, y el afecto sincero,
antiguo, de aquellos tiempos lejanos, y malos, como reporteros de la calle, unidos
por el antiguo y colosal terror de la libreta en blanco, y el miserable salario
mínimo, que aún pagan muchos de los periódicos, o de las estaciones de radio, y
por supuesto, de la televisión local.
Esta elegía no es nada personal, ni Tampoco es cosa de
negocios.
José Luis Urban Ocampo, Director de Seguridad Pública del
Estado, no estaba en la Ciudad. Se duele de que el gobernador "no se atravesó
por él", la tarde del domingo 11 de agosto. Y se queja de que prácticamente,
"lo tiró al voladero". Urban Ocampo es un soldado solitario, con su
guerra personal, en un mundo violento, matizado siempre, por las traiciones
políticas.
A Gabriela Antonieta González Chong, Le dictaron el
contenido, para que fuera divulgado como un boletín de prensa, que fue publicado
en diversos portales digitales de noticias por la internet, el Domingo 11
agosto, del año 2013, a partir de las 17 horas con 23 minutos.
Según el comunicado: "al encontrarse en la sala de
espera para pasar a la certificación médica, Ángel Javier Rodríguez pidió ir al
baño, realizó sus necesidades físicas y al salir del sanitario, y posiblemente
a que el piso estaba resbaloso por el agua que había, el joven perdió el
equilibrio en un desnivel y cayó de su propia altura, sobre su costado
izquierdo".
Al escuchar la caída, dos policías le ayudaron a incorporarse y Ángel Javier manifestó
sentir dolor. En el pasillo de la sala de espera caminó metro y medio
aproximadamente cuando se desvaneció, por lo que los elementos de inmediato
solicitaron la presencia del médico, quien acudió acompañado por personal para
médico y al estarle prestando atención médica, el mismo falleció.
Se informó que solicitaron la intervención del Agente del
Ministerio Público, quien dio fe y ordenó el traslado del cuerpo al Servicio
Médico Forense, en donde le fue practicada la necropsia para establecer la
causa del fallecimiento.
Los otros cinco detenidos están a disposición del fiscal que
tomó conocimiento de los hechos, dice el comunicado. FIN DEL COMUNICADO DE
PRENSA.
El Lunes 19 agosto, del año 2013, fueron liberados y
declarados inocentes: "El Juzgado Octavo del Ramo Penal dictó anoche auto
de libertad a cinco de los siete detenidos involucrados en la balacera
registrada el sábado 10 de agosto en el Mercado República".
Ángel Javier Rodríguez González, el joven de 21 años que fue
asesinado a golpes por policías estatales, hubiera salido absuelto de seguir
con vida
El proceso penal 152/2013 del Juzgado Octavo, señala que el
ahora occiso Ángel Javier Rodríguez González, no fue detenido en el lugar de
los hechos y por lo tanto, estaría libre si aún viviera porque se le habría
declarado absuelto.
A los detenidos liberados se les acusaba de homicidio
calificado en grado de tentativa, robo calificado en grado de tentativa,
exposición al peligro y asociación delictuosa.
Los ahora liberados son Daniel Mireles Esparza, de 29 años
de edad; Juan Esparza Saucedo, de 30 años; Marcos Esparza Saucedo de 41,
Eugenio Esparza Saucedo de 34 y Jesús Almendárez Valtierra de 20. FIN DE LA
NOTA SOBRE LA LIBERTAD DE LOS 5 DETENIDOS.
El relato de su madre fue publicado en el periódico PULSO:
"La cadena de abusos que culminó con la muerte de Ángel Javier, comenzó en
su casa, ubicada en la colonia Foresta horas antes, cuando el joven obrero se
encontraba en una fiesta infantil en la cual hacía las veces de padrino de su
sobrina.
La celebración, para la cual el obrero había destinado gran
parte del sueldo que ganaba en la empresa Link, una proveedora de General
Motors, se desarrollaba con toda normalidad el sábado 10 de agosto hasta que cerca de las 9:00 de la
noche, los integrantes de la familia Rodríguez González escucharon un gran
alboroto en la casa de sus vecinos.
Agentes de la Policía Estatal habían llegado para allanar la
vivienda y detener a quien encontraran a su paso, así, sin orden judicial
alguna.
“Cuando las patrullas se fueron mis vecinas gritaban muy feo
y nosotros salimos a abrazarlas y a intentar calmarlas. Estuvimos con ellas
unos 30 minutos hasta que la patrulla 2216 pasó dos veces por el Camino a la
Libertad y Palmas, la calle donde vivía Ángel. En una tercera vuelta, llegaron
otras ocho camionetas y carros blancos tipo Charger con más de 50 agentes”.
Fabiola relata que las unidades se pararon y uno de los
policías se bajó por su hermano a quien literalmente arrancó de las manos de
doña Nancy Elena, su madre, mientras Fabiola era golpeada por otros agentes.
El único delito de su hermano fue pues, estar en la calle
solidarizándose con sus vecinas que acababan de ser víctimas del uso abusivo de
la fuerza pública.
“Entrábamos y salíamos porque buscábamos el teléfono de la
Comandancia de la Policía de Soledad y le dijimos a la vecina que se tomaría
tiempo saber a dónde se habían llevado a su hijo”, relata la hermana del joven
masacrado por los estatales.
Doña Nancy Elena recuerda que Ángel Javier había pasado toda
la tarde del sábado en su casa, ocupado precisamente en los preparativos de la
fiesta de su sobrina. Señala que se metió a trabajar para aportar recursos al
sostenimiento del hogar que compartía con ella.
Fabiola trató de alcanzar las patrullas en que se llevaban a
su hermano, pero un policía la detuvo y le ordenó retirarse. FIN DEL TESTIMONIO
DE SU MADRE.
Bien, y a todo esto: ¿EN DÓNDE ESTÁN LOS PISTOLEROS?
¡JUSTICIA!
SAN LUIS POTOSÍ. MÉXICO
● En demanda de justicia, el ex
diputado local del desparecido partido político, denominado Frente Cardenista
de Reconstrucción Nacional (FCRN), José
Tomás Rosales López, colocó otra vez, mantas de protesta en la fachada del
palacio de gobierno.
Y a pesar de la oposición de funcionarios estatales, el ex
legislador local Tomás Rosales López se instaló esta mañana frente a Palacio de
Gobierno, en demanda del esclarecimiento del levantón del y asesinato de su
hijo, Pedro Pablo Rosales, de lo cual se cumplieron dos años, el pasado 11 de
agosto.
Exige acciones y respuestas. Ya está hastiado de la
burocracia, que todo lo enreda y todo lo impide. Lo anterior luego de que ayer
un grupo de policías estatales le
impidieron el acceso a la plaza de Armas. Este día ingresó con una batería de automóvil,
amplificador, megáfono y micrófono.
Instaló una manta de protesta es en contra del actual
Delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor (PROFECO), José
Luis Ruiz Contreras.
Rosales López lo acusa de manera llana y directa ser el
protector de los delincuentes que mataron a su hijo Juan Pablo Rosales, cuando
José Luis Ruiz Contreras, fue secretario particular del Procurador de Justicia
en el Estado, Miguel Ángel García Covarrubias.
El 4 de mayo del año en curso, fue cesado de ese puesto.
Unos días después fue nombrado Delegado Estatal de la PROFECO, por la
protección que le brinda el Secretario General de Gobierno Cándido Ochoa Rojas.
El jueves 4 de abril del 2013, el ex diputado local, Tomás
Rosales López, realizó una protesta frente a las oficinas de la Procuraduría
General de Justicia del Estado. Rosales López, quien fue diputado local durante
la LVIII (1990-1992) por el entonces Partido del Frente Cardenista de
Reconstrucción Nacional, exige el esclarecimiento del caso.
Durante su intervención Rosales López acusó a José Luis Ruiz
Contreras, secretario particular del titular de la Procuraduría General de
Justicia del Estado, Miguel Ángel García Covarrubias, de proteger a los
delincuentes que asesinaron a su hijo Juan Pablo Rosales.
Sobre una parte de la fachada de la sede del Poder Ejecutivo
instaló mantas con diversos mensajes. Los policías estatales no le permitán el ingreso a la plaza principal.
Dijo que Catalina Villalobos Quevedo, secretaría particular
del titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Miguel Ángel
García Covarrubias, le informó que en esta semana lo recibe
el procurador.
Tras lo cual, indicó, “me pidieron que me retirara, sin
embargo yo quiero seguir aquí”, frente a Palacio de Gobierno.
¡QUE SE VAYA EL PROCURADOR Y EL SECRETARIO DE SEGURIDAD!
SAN LUIS POTOSÍ. MÉXICO ●
Los diputados locales Alejandro Vera Noyola y Francisco Martínez Ibarra,
pidieron cambios en el gabinete de seguridad pública de Gobierno del Estado.
El legislador perredista, Martínez Ibarra, consideró
indispensables relevos en la Procuraduría General de Justicia del Estado,
Miguel Ángel García Covarrubias y en la Secretaría de Seguridad Pública del
Estado, encabezada por Joel Melgar Arredondo.
Lo anterior, tras los recientes incidentes en que se han
involucrado elementos de la Dirección General de Seguridad Pública del Estado,
como la muerte de un menor de edad en Ciudad Valles y el deceso de un detenido
en las celdas de la corporación.
Vera Noyola opinó que el gobernador Fernando Toranzo
Fernández, tiene buenas intenciones pero que su gabinete no le ayuda. En ese
tenor se manifestó en pro del cambio de algunos de sus colaboradores en el
gabinete de seguridad pública.