HOLLYWOOD ● Mucho hemos hablado del fenómeno de Bohemian Rhapsody o Roma gracias a la repercusión de ambas entre cinéfilos y expertos, de maneras distintas pero sin dejarnos indiferentes. Pero si hay alguien que realmente está viviendo en sus propias carnes un fenómeno histórico, esa es Yalitza Aparicio. La vida de la protagonista de Roma jamás volverá a ser la misma. Esta película cambió su vida.
Hay quienes creerán que Rami Malek también vivirá un giro radical en su carrera gracias a Bohemian Rhapsody. Y es cierto. Pero él ya venía cosechando éxitos con Mr. Robot y su carrera venía en ascenso desde hace varios años. Su momento se veía venir. Pero el de Yalitza no. En cuestión de pocos meses -o semanas desde el estreno de la película en Netflix- esta mexicana de 26 años, que hasta hace poco buscaba trabajo como maestra rural de preescolar, ha encontrado un mundo que desconocía y un reconocimiento que jamás habría imaginado.
Su papel de Cleo, la empleada de una familia de clase media-alta del México de los años 70, la llevará a competir por el Oscar a la Mejor Actriz contra la mismísima Glenn Close, con unas expertas delante de la cámara como Olivia Colman y Melissa McCarthy, y con una diva sin igual como Lady Gaga.
Su vida cambió hace casi tres años. Y prácticamente por accidente. Esta joven creció en Tlaxiaco, un municipio pobre y de extrema violencia, al noroeste del estado mexicano de Oaxaca que este mismo 1 de enero vio cómo asesinaban a su alcalde justo después de jurar el cargo.
Yalitza, que ahora ilustra portadas de revistas de prestigio como Vogue y Vanity Fair, estaba buscando trabajo cuando su hermana Edith le pidió que la acompañara a un casting que hacían en el pueblo. Edith siempre había soñado con ser actriz y quiso acercarse al casting ni bien supo que había una prueba en el pueblo.
Pero debido a la violencia y el miedo al tráfico de mujeres, fueron juntas. Se marcharon de la casa que comparten con su familia en Campo de Aviación, una colonia anclada en una pista clandestina de aterrizaje, y llegaron al casting con temor de que fuera una trampa de la trata de personas.
Pero Edith estaba en avanzado estado de gestación y al llegar se descompuso, pidiéndole a su hermana que ocupara su lugar. Así, al menos, sabrían de qué iba la cosa. Yalitza entró y lo hizo, sin saber lo que vendría semanas más tarde.
Poco después la convocaron para una segunda prueba en el Estado de México, y su periplo comenzaba. Como no hablaba mixteco, y el personaje lo requería, le sugirieron que fuera con una amiga que pudiera ayudarla. Esa amiga era Nancy García, que también aparece en la película dando vida a Adela. Y cuando Alfonso Cuarón la vio, supo que era la indicada para ayudarle a contar la historia de su nana Liboria Rodríguez, así como el divorcio de sus padres y el ambiente convulso de México en los años 70.
Con su ternura y naturalidad, superó un casting de más de 3 mil mexicanas que pasaron por la prueba a lo largo de un proceso que duró casi un año. Y, curiosamente, ninguna sabía nada de qué trataba el proyecto. Fue recién dos semanas antes de comenzar el rodaje que Alfonso Cuarón le otorgó el papel.
HA NACIDO UNA ESTRELLA:
Yalitza no tuvo una niñera como el papel que interpreta, pero según contó en varias entrevistas, la figura más cercana que tuvo fue su propia madre, quien sacó sola a sus hijos adelante.
A pesar de crecer en una comunidad pobre y de bajos recursos, esta joven convertida en actriz terminó la licenciatura en Educación Preescolar, pero nunca llegó a ejercer por culpa de los conflictos sindicales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. Cuando fue al casting estaba esperando una plaza en algún colegio y se ganaba la vida ayudando a su hermana a construir piñatas.
Yalitza contó en varias entrevistas que siempre fue muy tímida y reservada, que no le gustaba tomarse fotos ni hablar en público. Por ello jamás había pensado en ser actriz. Nunca. Es más, ni siquiera veía cine ni sabía quién era Alfonso Cuarón y tuvo que buscar su nombre en Internet cuando le dijeron quién era el director que podría convertirse en su jefe.
Ahora, por fortuna del destino, su interpretación está nominada al Oscar, es la primera actriz latina nominada desde Catalina Sandino en María llena eres de gracia en 2005 y la primera mexicana desde Salma Hayek en 2002 por Frida. Y es más, la revista Time la eligió la mejor actuación de 2018.